
Autoridades de Costa Rica y Estados Unidos se unen para salvarle la vida a un pescador nicaragüense que estaba a más de 700 kilómetros de Puntarenas
➡️Pescadfor fue llevado a Puntarenas y enviado al hospital
Además de fortalecer la lucha antidrogas en Centroamérica, el Patrullaje Conjunto entre Costa Rica y Estados Unidos ha permitido salvar muchas vidas, una de las cuales es la de un pescador nicaragüense que esta semana fue rescatado gracias a una operación desarrollada por autoridades costarricenses y estadounidenses.
Según lo informado por el comisario Martín Arias, director general del Servicio Nacional de Guardacostas, todo inició con un reporte efectuado el pasado martes 16 de junio a las 5 de la mañana.
Ese día, vía 9-1-1, al Servicio Nacional de Guardacostas fue reportado un incidente en el que se indicaba que un tripulante de nombre Carlos Enrique Larios Chavarría, de 40 años de edad, y quien es un ciudadano nicaragüense residente en Costa Rica, se había accidentado en altamar.
De acuerdo con dicho reporte, Larios se encontraba a bordo del barco pesquero costarricense El Indio, con matrícula de Puntarenas P-8527, cuando se accidentó golpeándose la cara y perdiendo el conocimiento poco después.
Durante el accidente sufrido por Larios, el pesquero se encontraba a 120 millas náuticas (222 kilómetros) al suroeste de la isla del Coco y a 384 millas náuticas (711 kilómetros) del puerto de Puntarenas, en aguas del Océano Pacífico.
Como es usual en estos casos, el personal del Guardacostas procedió a comunicarse con sus homólogos de los Estados Unidos que se encontraban en labores de patrullaje antidrogas en el área para saber si era viable que ellos pudieran colaborar.
Los guardacostas estadounidenses indicaron que sí podían ayudar y, tres horas después, localizaron la embarcación pesquera costarricense y le brindaron soporte medico al paciente, quien tenía un golpe en la cabeza y posible fractura en el tabique nasal, además de pérdida del conocimiento.
Los estadounidenses indicaron luego que urgía brindarle atención médica de emergencia al paciente en algún centro hospitalario, por lo que tras estabilizarlo darle primeros auxilios lo iban a acercar a las costas nacionales para que una embarcación del Servicio Nacional de Guardacostas pudiera llegar a un punto de encuentro a fin de recibir al paciente.
Tras coordinar con la Estación de Guardacostas de Caldera, cantón de Esparza, Puntarenas, finalmente zarpó la lancha interceptora GC 33-01, la cual llevaba a bordo a dos paramédicos de la Cruz Roja.

Tal y como estaba planeado, a la una de la madrugada del miércoles 17 la embarcación estadounidense que lo transportaba hizo contacto con la lancha del Guardacostas a 60 millas náuticas, es decir unos 111 kilómetros, de Puntarenas.
Enseguida el pescador fue trasladado basta Puntarenas, donde a las 4:50 de la madrugada de ese día fue entregado a la unidad 16-20 de la Cruz Roja en muelle turístico de y trasladado de inmediato hasta el Hospital Monseñor Sanabria donde llegó estable.