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48 años de ser mecánico automotriz lo llenan de vida y voluntad

Piter el mecánico Municipal

Pedro José Ordoñez Díaz es uno de los mecánicos experimentados que tiene la Municipalidad des Puntarenas, es el que tiene que darle vida y mantenimiento a todos los vehículos municipales.

«Piter» de 61 años de edad trabaja junto a sus 6 compañeros más del departamento de mecánica del Plantel Municipal.

Para la municipalidad tiene 13 años de laborar y fue a sus 13 años que inició con las herramientas haya por los años 1971.

Su trayectoria inició en el taller mecánicos unidos en Puntarenas ya que le gustó y en este taller aprendió, al ver que estar lleno de aceite y grasa era lo suyo, decidió llevar dos cursos de mecánica motor gasolina y mecánica motor diésel en el INA y dejor una trayectoria de 35 años en este taller porteño.

«La mecánica para mi es todo es lo que me encanta hacer desde que tenía 13 años, un taller en Puntarenas me abrió las puertas y fue ahí donde inicie y aprendí mucho además de los cursos que lleve en el ina. Comento Pedro.

Sin duda una trayectoria excelente e intachable que a hecho que se gane el respeto de sus compañeros y de la Municipalidad.

«Piter» es vecino de Juanito Mora y padre de tres hijos dos mujeres y un hombre

En el plantel llegan desde vagonetas, camiones recolectores y vehículos livianos a los cuales tiene que brindarle mantenimiento y reparaciones para que salgan nuevamente a trabajar a las calles del Puerto.

«Trabajar en el Plantel de la Muni a sido una gran experiencia, pasar de un taller de carros livianos a un plantel donde cuando inicie en el 2006 era ver camiones pesados fue algo que me llenó más de conocimiento, orgullosamente puedo decir que soy un buen mecánico gracias a Dios» comentó Piter.

El fallecimiento de uno de sus compañeros de electromecánica fue Alexander Salinas conocido como «Tiqui» eso lo marcó de mucho dolor su fallecimiento de un paro cardiorrespiratorio que sufrió este año, he incluso Pedro fue quien lo llevó a la clínica San Rafael de Puntarenas.

«Tiqui era un compañero intachable un hombre trabajador con el cual todos en el plantel nos llevábamos muy bien, su partida fue dolorosa y nos dejó un gran vacío, un hombre joven sin vicios pero Dios lo quiso con Él, fue a mi quien me tocó llevarlo a la clínica y de ahí lo llevaron grave al hospital donde minutos después nos dieron la dura noticia» comentó Piter.

En el plantel se trabaja con mucha hermandad y con dedicación a realizar un trabajo de calidad y como dicen ellos con la camisa muy bien puesta.

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